En Baja California fue inaugurada
la primera vivienda bioclimática, proyecto que ha sido encabezado por la
Universidad Autónoma de Baja California (UABC), que tiene la intención de
ayudar a las familias de escasos recursos con los gastos de la energía eléctrica.
Los estudiantes, apoyados por el
Gobierno Federal, desarrollaron dos modelos: uno tradicional y otro de concreto
celular, a fin de vigilar la constancia en cuanto a la temperatura que se
establece al interior de la unidad.
José Antonio Zárate, vicepresidente
de Vivienda en la Cámara Mexicana de la Industria de Construcción (CMIC),
expresó la intención de promover esta clase de viviendas que buscan ahorrar
energía eléctrica y espera que los desarrolladores se animen a construirlas en
un futuro cercano.
“El concreto celular es una
tecnología alemana donde se involucran varios materiales como cal, cemento,
yeso y arena silica y en la composición de esos
materiales, se hacen millones de celdas de aire en el interior, que es lo que
lo hace ligero, acústico, térmico y resistente al fuego”, dijo.
Destacó que la Comisión Federal de
Electricidad validó el proyecto, el cual logra un ahorro de alrededor del 35%.
La primera vivienda bioclimática se
encuentra ubicada en las inmediaciones del fraccionamiento Parajes de Puebla.
Fuente: Centrourbano
Existe
una serie de definiciones para una smart city, José Antonio Torres,
líder del proyecto Distrito Tec, impulsado por el Tecnológico de
Monterrey, considera que es un espacio urbano donde se utiliza la
tecnología, pero primordialmente se facilita la relación de los
ciudadanos con su entorno urbano y sus autoridades, donde haya mejores
servicios, para después agregar los elementos tecnológicos necesarios.
Hoy en día, las ciudades crecen sin orden, ni diseño, sin pensar cómo
la evolución de la mancha urbana afectará a las comunidades, por ello,
Torres opina que lo principal es pensar cómo diseñar las ciudades, de
tal manera que sean benéficas para los habitantes, ya después se deberá
añadir el complemento tecnológico, pero primero se debe crear una
proyección para definir si la ciudad será positiva o afectará al entorno
urbano.
“El beneficio principal para la población no es poner la tecnología
en sí, sino aprovechar su participación para la mejora de los servicios,
con ahorro de energía, agua, etcétera, para complementar la visión de
una smart city en beneficio de ellos mismos”, comenta.
“En Distrito Tec trabajamos en una primera línea, en el diseño
urbano, es un distrito de 430 hectáreas, que en futuro contará con
condiciones excelentes de vida para las personas que la habitan, con
espacios públicos, parques, banquetas, calles de calidad, bellos
atractivos, y además, será un espacio urbano donde se respete los
lineamientos de construcción, los servicios funcionen con calidad y la
convivencia sea productiva, donde existan asociaciones de vecinos
preocupados y ocupados en que su ciudad mejore, además de que se
promueva el cuidado de la naturaleza, donde nos cuidemos como vecinos,
para después agregar las herramientas y la metodología necesarias”,
explica.
El proyecto de Distrito Tec está visualizado a 15 años y comenzó en
2013, ahora mismo se encuentra en la coordinación con los vecinos, con
13 mesas de trabajo con las colonias participantes, quienes ayudan a la
universidad a identificar los problemas y las soluciones, para crear un
mejor entorno. Aquí se pretende la creación de un clúster de
investigación, donde las empresas inviertan y los profesionistas, el
talento de universitarios y personas que no pertenecen a la universidad,
convivan en un mismo espacio, además del desarrollo de espacios de
entretenimiento, centros comerciales, vivienda, parques y centros
recreativos.
“Ahora mismo tenemos la implementación de mecanismos para aprovechar
las áreas de investigación y todo el espacio urbano, estamos en
coordinación con el gobierno municipal y estatal, el pasado 18 de agosto
abrimos 1.5 kilómetros de una ciclovía exterior, para que los alumnos
que viven cerca no tengan que usar el coche y lleguen por este medio,
queremos ir abriendo el campus, para que la sociedad participe en esta
nueva ciudad”, añade.
Actualmente se crean diseños de vivienda dentro de lo que se tiene
proyectado para la smart city, con un inicio muy alentador por el
interés de inversionistas en investigación y desarrollo de vivienda, así
como de centros de entretenimiento, dice José Antonio Torres.
El monto necesario para la implementación de este gran proyecto es de
más de 3 mil 500 millones de dólares, de los cuales el Tec de Monterrey
aportará 500 millones de dólares, alrededor de 200 millones ya se
encuentran autorizados, para la transformación del campus, también se
pretende atraer la inversión de 500 millones de dólares por parte de
empresas dedicadas a la investigación, para la creación de un clúster y
predios, donde la idea principal sea la innovación. Los 2 mil 500
millones restantes serán para el desarrollo de centros comerciales,
viviendas, transporte público, espacios de entretenimiento, entre otros.
Buscarán extender el proyecto a otros campus
El líder del proyecto espera que pronto se comience a trabajar en
otros puntos donde existe alguna universidad del Tecnológico,
principalmente en la ciudad de México, en la que se pretende aprovechar
la experiencia y la proyección del modelo en Monterrey, como una prueba
para identificar errores y aciertos, para implementar esta idea en los
demás campus.
“Existe un problema grave, en las ciudades mexicanas en los últimos
30 años, en un periodo aproximado de 1980 a 2010, la población urbana se
duplicó y la mancha urbana se multiplicó por siete, eso nos genera
ciudades dispersas, extensas, donde tenemos espacios históricos
semiabandonados, y colonias nuevas lejanas de donde se encuentran los
servicios y los lugares de trabajo, son nuevas pero no cuentan con el
servicio de calidad que se requiere”, analiza.
Torres retoma como ejemplo a Monterrey, donde existen 17 colonias,
las cuales perdieron alrededor de 25 por ciento de la población en los
últimos 10 años, lo que afecta al urbanismo, generando un fenómeno
horizontal, por ello, Distrito Tec, “actuará para genera nueva vitalidad
a la zona, donde se dé el encuentro de las personas y talentos, en
espacios de investigación, donde haya emprendimiento, y donde la gente
quiera vivir, porque hay una buena calidad de vida”, finaliza.
- See more at: http://centrourbano.com/primordial-conocer-como-disenar-ciudades/#sthash.n6dnoCKX.dpuf
Existe
una serie de definiciones para una smart city, José Antonio Torres,
líder del proyecto Distrito Tec, impulsado por el Tecnológico de
Monterrey, considera que es un espacio urbano donde se utiliza la
tecnología, pero primordialmente se facilita la relación de los
ciudadanos con su entorno urbano y sus autoridades, donde haya mejores
servicios, para después agregar los elementos tecnológicos necesarios.
Hoy en día, las ciudades crecen sin orden, ni diseño, sin pensar cómo
la evolución de la mancha urbana afectará a las comunidades, por ello,
Torres opina que lo principal es pensar cómo diseñar las ciudades, de
tal manera que sean benéficas para los habitantes, ya después se deberá
añadir el complemento tecnológico, pero primero se debe crear una
proyección para definir si la ciudad será positiva o afectará al entorno
urbano.
“El beneficio principal para la población no es poner la tecnología
en sí, sino aprovechar su participación para la mejora de los servicios,
con ahorro de energía, agua, etcétera, para complementar la visión de
una smart city en beneficio de ellos mismos”, comenta.
“En Distrito Tec trabajamos en una primera línea, en el diseño
urbano, es un distrito de 430 hectáreas, que en futuro contará con
condiciones excelentes de vida para las personas que la habitan, con
espacios públicos, parques, banquetas, calles de calidad, bellos
atractivos, y además, será un espacio urbano donde se respete los
lineamientos de construcción, los servicios funcionen con calidad y la
convivencia sea productiva, donde existan asociaciones de vecinos
preocupados y ocupados en que su ciudad mejore, además de que se
promueva el cuidado de la naturaleza, donde nos cuidemos como vecinos,
para después agregar las herramientas y la metodología necesarias”,
explica.
El proyecto de Distrito Tec está visualizado a 15 años y comenzó en
2013, ahora mismo se encuentra en la coordinación con los vecinos, con
13 mesas de trabajo con las colonias participantes, quienes ayudan a la
universidad a identificar los problemas y las soluciones, para crear un
mejor entorno. Aquí se pretende la creación de un clúster de
investigación, donde las empresas inviertan y los profesionistas, el
talento de universitarios y personas que no pertenecen a la universidad,
convivan en un mismo espacio, además del desarrollo de espacios de
entretenimiento, centros comerciales, vivienda, parques y centros
recreativos.
“Ahora mismo tenemos la implementación de mecanismos para aprovechar
las áreas de investigación y todo el espacio urbano, estamos en
coordinación con el gobierno municipal y estatal, el pasado 18 de agosto
abrimos 1.5 kilómetros de una ciclovía exterior, para que los alumnos
que viven cerca no tengan que usar el coche y lleguen por este medio,
queremos ir abriendo el campus, para que la sociedad participe en esta
nueva ciudad”, añade.
Actualmente se crean diseños de vivienda dentro de lo que se tiene
proyectado para la smart city, con un inicio muy alentador por el
interés de inversionistas en investigación y desarrollo de vivienda, así
como de centros de entretenimiento, dice José Antonio Torres.
El monto necesario para la implementación de este gran proyecto es de
más de 3 mil 500 millones de dólares, de los cuales el Tec de Monterrey
aportará 500 millones de dólares, alrededor de 200 millones ya se
encuentran autorizados, para la transformación del campus, también se
pretende atraer la inversión de 500 millones de dólares por parte de
empresas dedicadas a la investigación, para la creación de un clúster y
predios, donde la idea principal sea la innovación. Los 2 mil 500
millones restantes serán para el desarrollo de centros comerciales,
viviendas, transporte público, espacios de entretenimiento, entre otros.
Buscarán extender el proyecto a otros campus
El líder del proyecto espera que pronto se comience a trabajar en
otros puntos donde existe alguna universidad del Tecnológico,
principalmente en la ciudad de México, en la que se pretende aprovechar
la experiencia y la proyección del modelo en Monterrey, como una prueba
para identificar errores y aciertos, para implementar esta idea en los
demás campus.
“Existe un problema grave, en las ciudades mexicanas en los últimos
30 años, en un periodo aproximado de 1980 a 2010, la población urbana se
duplicó y la mancha urbana se multiplicó por siete, eso nos genera
ciudades dispersas, extensas, donde tenemos espacios históricos
semiabandonados, y colonias nuevas lejanas de donde se encuentran los
servicios y los lugares de trabajo, son nuevas pero no cuentan con el
servicio de calidad que se requiere”, analiza.
Torres retoma como ejemplo a Monterrey, donde existen 17 colonias,
las cuales perdieron alrededor de 25 por ciento de la población en los
últimos 10 años, lo que afecta al urbanismo, generando un fenómeno
horizontal, por ello, Distrito Tec, “actuará para genera nueva vitalidad
a la zona, donde se dé el encuentro de las personas y talentos, en
espacios de investigación, donde haya emprendimiento, y donde la gente
quiera vivir, porque hay una buena calidad de vida”, finaliza.
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Existe
una serie de definiciones para una smart city, José Antonio Torres,
líder del proyecto Distrito Tec, impulsado por el Tecnológico de
Monterrey, considera que es un espacio urbano donde se utiliza la
tecnología, pero primordialmente se facilita la relación de los
ciudadanos con su entorno urbano y sus autoridades, donde haya mejores
servicios, para después agregar los elementos tecnológicos necesarios.
Hoy en día, las ciudades crecen sin orden, ni diseño, sin pensar cómo
la evolución de la mancha urbana afectará a las comunidades, por ello,
Torres opina que lo principal es pensar cómo diseñar las ciudades, de
tal manera que sean benéficas para los habitantes, ya después se deberá
añadir el complemento tecnológico, pero primero se debe crear una
proyección para definir si la ciudad será positiva o afectará al entorno
urbano.
“El beneficio principal para la población no es poner la tecnología
en sí, sino aprovechar su participación para la mejora de los servicios,
con ahorro de energía, agua, etcétera, para complementar la visión de
una smart city en beneficio de ellos mismos”, comenta.
“En Distrito Tec trabajamos en una primera línea, en el diseño
urbano, es un distrito de 430 hectáreas, que en futuro contará con
condiciones excelentes de vida para las personas que la habitan, con
espacios públicos, parques, banquetas, calles de calidad, bellos
atractivos, y además, será un espacio urbano donde se respete los
lineamientos de construcción, los servicios funcionen con calidad y la
convivencia sea productiva, donde existan asociaciones de vecinos
preocupados y ocupados en que su ciudad mejore, además de que se
promueva el cuidado de la naturaleza, donde nos cuidemos como vecinos,
para después agregar las herramientas y la metodología necesarias”,
explica.
El proyecto de Distrito Tec está visualizado a 15 años y comenzó en
2013, ahora mismo se encuentra en la coordinación con los vecinos, con
13 mesas de trabajo con las colonias participantes, quienes ayudan a la
universidad a identificar los problemas y las soluciones, para crear un
mejor entorno. Aquí se pretende la creación de un clúster de
investigación, donde las empresas inviertan y los profesionistas, el
talento de universitarios y personas que no pertenecen a la universidad,
convivan en un mismo espacio, además del desarrollo de espacios de
entretenimiento, centros comerciales, vivienda, parques y centros
recreativos.
“Ahora mismo tenemos la implementación de mecanismos para aprovechar
las áreas de investigación y todo el espacio urbano, estamos en
coordinación con el gobierno municipal y estatal, el pasado 18 de agosto
abrimos 1.5 kilómetros de una ciclovía exterior, para que los alumnos
que viven cerca no tengan que usar el coche y lleguen por este medio,
queremos ir abriendo el campus, para que la sociedad participe en esta
nueva ciudad”, añade.
Actualmente se crean diseños de vivienda dentro de lo que se tiene
proyectado para la smart city, con un inicio muy alentador por el
interés de inversionistas en investigación y desarrollo de vivienda, así
como de centros de entretenimiento, dice José Antonio Torres.
El monto necesario para la implementación de este gran proyecto es de
más de 3 mil 500 millones de dólares, de los cuales el Tec de Monterrey
aportará 500 millones de dólares, alrededor de 200 millones ya se
encuentran autorizados, para la transformación del campus, también se
pretende atraer la inversión de 500 millones de dólares por parte de
empresas dedicadas a la investigación, para la creación de un clúster y
predios, donde la idea principal sea la innovación. Los 2 mil 500
millones restantes serán para el desarrollo de centros comerciales,
viviendas, transporte público, espacios de entretenimiento, entre otros.
Buscarán extender el proyecto a otros campus
El líder del proyecto espera que pronto se comience a trabajar en
otros puntos donde existe alguna universidad del Tecnológico,
principalmente en la ciudad de México, en la que se pretende aprovechar
la experiencia y la proyección del modelo en Monterrey, como una prueba
para identificar errores y aciertos, para implementar esta idea en los
demás campus.
“Existe un problema grave, en las ciudades mexicanas en los últimos
30 años, en un periodo aproximado de 1980 a 2010, la población urbana se
duplicó y la mancha urbana se multiplicó por siete, eso nos genera
ciudades dispersas, extensas, donde tenemos espacios históricos
semiabandonados, y colonias nuevas lejanas de donde se encuentran los
servicios y los lugares de trabajo, son nuevas pero no cuentan con el
servicio de calidad que se requiere”, analiza.
Torres retoma como ejemplo a Monterrey, donde existen 17 colonias,
las cuales perdieron alrededor de 25 por ciento de la población en los
últimos 10 años, lo que afecta al urbanismo, generando un fenómeno
horizontal, por ello, Distrito Tec, “actuará para genera nueva vitalidad
a la zona, donde se dé el encuentro de las personas y talentos, en
espacios de investigación, donde haya emprendimiento, y donde la gente
quiera vivir, porque hay una buena calidad de vida”, finaliza.
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José
Antonio Torres, líder del proyecto Distrito Tec, platica la importancia
de aprovechar al máximo un espacio urbano para hacer ciudad
Existe una serie de definiciones para una smart city, José Antonio
Torres, líder del proyecto Distrito Tec, impulsado por el Tecnológico de
Monterrey, considera que es un espacio urbano donde se utiliza la
tecnología, pero primordialmente se facilita la relación de los
ciudadanos con su entorno urbano y sus autoridades, donde haya mejores
servicios, para después agregar los elementos tecnológicos necesarios.
Hoy en día, las ciudades crecen sin orden, ni diseño, sin pensar cómo
la evolución de la mancha urbana afectará a las comunidades, por ello,
Torres opina que lo principal es pensar cómo diseñar las ciudades, de
tal manera que sean benéficas para los habitantes, ya después se deberá
añadir el complemento tecnológico, pero primero se debe crear una
proyección para definir si la ciudad será positiva o afectará al entorno
urbano.
“El beneficio principal para la población no es poner la tecnología
en sí, sino aprovechar su participación para la mejora de los servicios,
con ahorro de energía, agua, etcétera, para complementar la visión de
una smart city en beneficio de ellos mismos”, comenta.
“En Distrito Tec trabajamos en una primera línea, en el diseño
urbano, es un distrito de 430 hectáreas, que en futuro contará con
condiciones excelentes de vida para las personas que la habitan, con
espacios públicos, parques, banquetas, calles de calidad, bellos
atractivos, y además, será un espacio urbano donde se respete los
lineamientos de construcción, los servicios funcionen con calidad y la
convivencia sea productiva, donde existan asociaciones de vecinos
preocupados y ocupados en que su ciudad mejore, además de que se
promueva el cuidado de la naturaleza, donde nos cuidemos como vecinos,
para después agregar las herramientas y la metodología necesarias”,
explica.
El proyecto de Distrito Tec está visualizado a 15 años y comenzó en
2013, ahora mismo se encuentra en la coordinación con los vecinos, con
13 mesas de trabajo con las colonias participantes, quienes ayudan a la
universidad a identificar los problemas y las soluciones, para crear un
mejor entorno. Aquí se pretende la creación de un clúster de
investigación, donde las empresas inviertan y los profesionistas, el
talento de universitarios y personas que no pertenecen a la universidad,
convivan en un mismo espacio, además del desarrollo de espacios de
entretenimiento, centros comerciales, vivienda, parques y centros
recreativos.
“Ahora mismo tenemos la implementación de mecanismos para aprovechar
las áreas de investigación y todo el espacio urbano, estamos en
coordinación con el gobierno municipal y estatal, el pasado 18 de agosto
abrimos 1.5 kilómetros de una ciclovía exterior, para que los alumnos
que viven cerca no tengan que usar el coche y lleguen por este medio,
queremos ir abriendo el campus, para que la sociedad participe en esta
nueva ciudad”, añade.
Actualmente se crean diseños de vivienda dentro de lo que se tiene
proyectado para la smart city, con un inicio muy alentador por el
interés de inversionistas en investigación y desarrollo de vivienda, así
como de centros de entretenimiento, dice José Antonio Torres.
El monto necesario para la implementación de este gran proyecto es de
más de 3 mil 500 millones de dólares, de los cuales el Tec de Monterrey
aportará 500 millones de dólares, alrededor de 200 millones ya se
encuentran autorizados, para la transformación del campus, también se
pretende atraer la inversión de 500 millones de dólares por parte de
empresas dedicadas a la investigación, para la creación de un clúster y
predios, donde la idea principal sea la innovación. Los 2 mil 500
millones restantes serán para el desarrollo de centros comerciales,
viviendas, transporte público, espacios de entretenimiento, entre otros.
Buscarán extender el proyecto a otros campus
El líder del proyecto espera que pronto se comience a trabajar en
otros puntos donde existe alguna universidad del Tecnológico,
principalmente en la ciudad de México, en la que se pretende aprovechar
la experiencia y la proyección del modelo en Monterrey, como una prueba
para identificar errores y aciertos, para implementar esta idea en los
demás campus.
“Existe un problema grave, en las ciudades mexicanas en los últimos
30 años, en un periodo aproximado de 1980 a 2010, la población urbana se
duplicó y la mancha urbana se multiplicó por siete, eso nos genera
ciudades dispersas, extensas, donde tenemos espacios históricos
semiabandonados, y colonias nuevas lejanas de donde se encuentran los
servicios y los lugares de trabajo, son nuevas pero no cuentan con el
servicio de calidad que se requiere”, analiza.
Torres retoma como ejemplo a Monterrey, donde existen 17 colonias,
las cuales perdieron alrededor de 25 por ciento de la población en los
últimos 10 años, lo que afecta al urbanismo, generando un fenómeno
horizontal, por ello, Distrito Tec, “actuará para genera nueva vitalidad
a la zona, donde se dé el encuentro de las personas y talentos, en
espacios de investigación, donde haya emprendimiento, y donde la gente
quiera vivir, porque hay una buena calidad de vida”, finaliza.
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